dilluns, 23 de febrer del 2015

EL SECRETO DE HÍPASO DE METAPONTO


Autor y obra:
Autor: Jesús Martín Rodríguez.
Obra: Helénicas 

Valoración personal: Me ha gustado la historia, ya que es sorprendente como cuenta que con una brebaje puedes recordar todas tus vidas y el echo de que el protagonista masculino de la historia no olvide a la mujer que le robó el corazón es su vida en la antigua es verdaderamente romántico y bonito. La manera en que la chica cuenta su historia es muy cautivadora, ya podría ser más largo el relato.

Resumen: Es una historia que sucede en la Antigua Grecia. Tulia es una prostituta que con sus encantos enamora a Marcial, un noble Ateniense que se acuesta con ella y a la mañana siguiente descubre su secreto. Tulia antes no era Tulia, sino que ha pasado muchas vidas de las cuáles se acuerda por un brebaje que su padre le hizo beber cuando era una niña. La historia de amor entre Tulia y Marcial continua durante la eternidad, ya que aunque pasen mil y una vidas y cambien de tipos personas, de siglos, de situaciones, siempre se acuerdan el uno del otro.

1. INTRODUCCIÓN
La situación de la mujer en Grecia:
La discriminación de la mujer griega, en concreto la mujer ateniense, era evidente, por que carecía de derechos y libertades. Era menospreciada por los hombres de la sociedad y estaba sometida a su poder. Además, esta situación de discriminación venía provocado por la incapacidad de mantener muchos hijos, sobretodo si eran niñas, puesto que a los pocos días del nacimiento de una mujer, la familia debía comenzar a ahorrar una futura dote, una contribución que se le daba al futuro marido de la niña para que éste la aceptase y se casase con ella. Por este motivo se producía e incrementaba el infanticidio femenino, al contrario que los niños varones, los cuales suponían una alegría en la familia, puesto que éstos recibían los bienes familiares y además la futura dote que se le entregaría en el momento del casamiento.  Las mujeres vivían tan sólo para el cuidado de la casa y de los hijos. Además, para los atenienses, la mujer nunca adquiría la mayoría de edad.


2. EL MATRIMONIO
Las salidas de la mujer ateniense se limitaban tan sólo a recoger agua a las fuentes más próximas. Además, éstas quedaban encerradas en el gineceo y excluídas de las cenas que sus maridos celebraban en la propia casa en compañía de sus amigos a las que no era raro que acudieran prostitutas al final de la noche. Así pues, la mujer era constantemente controlada por su marido y sometida a la constante sospecha de infidelidad.
Las bodas o himeneos atenienses: No eran asuntos entre hombre- mujer, sino que se basaba en un contrato que establecían el padre de la chica y la familia del novio o incluso con el propio novio, donde éste aceptaba a su futura esposa y una dote. Seguidamente, la mujer se transladaba a la casa del marido abandonando la suya. Además, la mujer tan sólo se casaba cuando adquiría la pubertad, en cosa los hombres lo hacían a los treinta años. 


3. LA PROSTITUCIÓN EN EL MUNDO ANTIGUO
Existían diferentes tipos entre los que podemos destacar:

Pornai: Las πόρναι, eran, normalmente, esclavas propiedad de un  proxenetael «pastor» de las prostitutas. Este propietario podía ser un ciudadano, para el que ese negocio constituía una fuente de ingresos como cualquier otra y por el que tenía que pagar un impuesto proporcional a los beneficios que le generaba.
En la época clásica, las pórnai son esclavas de origen bárbaro; a partir del período helenístico, se incorporan incluso al gremio muchas jóvenes esclavas, que solo dejarían de serlo cuando fuesen adoptadas por su amo.
Su trabajo se desarrollaba en los prostíbulos, generalmente en los barrios conocidos por esta actividad, tales como El Pireo(puerto de Atenas) o el Cerámico de Atenas.
Prostitutas independientes: Directamente en la calle, mostrándose a los cliente potenciales recurriendo a distintos mecanismos publicitarios.
Estas prostitutas son de orígenes diversos: mujeres metecas que no encuentran otro empleo en la ciudad de llegada, viudas pobres, antiguas pornai que han logrado independizarse.
En Atenas, debían estar registradas y pagar un impuesto. Algunas consiguen hacer fortuna en su oficio. 
Heteras: Constituyen la categoría más alta entre las prostitutas. A diferencia de las otras, no se contentan con ofrecer sólo servicios sexuales y sus prestaciones no son puntuales (de manera literal, en griego ἑταίρα, hetaíra significa 'compañía'). Comparables en cierta medida a las geishas. poseen una educación esmerada y son capaces de tomar parte en las conversaciones entre gentes cultivadas. Únicas entre todas las mujeres de Grecia, son independientes y pueden administrar sus bienes.

4. BIBLIOGRAFÍA